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Fiscal de EE.UU. incluye a México en lista de adversarios de EE.UU.

Durante su comparecencia ante el Comité de Gastos del Senado, Bondi aseguró que Estados Unidos no bajará la guardia frente a naciones que, según su visión, facilitan el tráfico de drogas hacia territorio norteamericano

La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, encendió las alertas diplomáticas este miércoles al declarar que México forma parte del grupo de países considerados una amenaza directa para la seguridad nacional estadounidense.

Durante su comparecencia ante el Comité de Gastos del Senado, Bondi aseguró que Estados Unidos no bajará la guardia frente a naciones que, según su visión, facilitan el tráfico de drogas hacia territorio norteamericano. “Nos mantendremos firmes contra cualquiera que intente dañar a nuestros niños, ya sea con armas, con amenazas o con drogas”, expresó, en alusión directa a cárteles mexicanos.

A pregunta del senador Lindsey Graham, sobre si el gobierno estadounidense podría ceder ante presiones de potencias extranjeras como Irán, la funcionaria respondió tajantemente: “No seremos intimidados. Bajo el liderazgo del presidente Trump, protegeremos al país a toda costa”.

Uno de los temas centrales de la audiencia fue el fentanilo. Aunque las autoridades de salud reportaron recientemente una reducción significativa en las muertes relacionadas con esta sustancia, Bondi advirtió que los cárteles continúan operando y que México permite su expansión. En particular, mencionó al Cártel de Sinaloa y al Jalisco Nueva Generación como los principales responsables de la distribución de esta droga en EE.UU.

Además de solicitar un aumento presupuestal para la fiscalía en 2026, la funcionaria sugirió que la lucha contra el narcotráfico debe considerarse también un asunto de seguridad nacional, al mismo nivel que otras amenazas externas.

La tensión aumentó cuando el senador Graham criticó duramente la postura del gobierno mexicano: “La mitad del país está bajo el control del crimen organizado. No estaremos seguros hasta que México cambie de estrategia”.

Las declaraciones han sido calificadas por analistas como un riesgo diplomático, dado que México no sólo es vecino geográfico, sino también el principal socio comercial de EE.UU. Las acusaciones llegan en un momento delicado, donde cualquier roce podría escalar en fricciones económicas o políticas más profundas.